Lost in the world: Barcelos

Barcelos es conocido por la leyenda del gallo de Barcelos, que cuenta que un peregrino gallego salía de Barcelos hacia Santiago de Compostela y se le acuso de robar dinero por lo que se le condenó a la orca. Su última voluntad fue ver al juez que estaba comiendo un gallo. El peregrino le dijo al juez que como prueba de que era inocente el gaño se levantaría y se pondría a cantar. El juez lo ignoro pero en el momento que iba a ser ahorcado el gallo se levantó y canto, el juez fue a la horca y el gallego seguía vivo ya que el nudo estaba mal.

Si alguien que ha ido a Portugal te ha regalado un paño o algo de allí con un gallo ya sabes el motivo por el que en muchos recuerdos de Portugal siempre sale al gallo.

Aparcamos al otro lado del casco histórico, tan solo cruzar el puente y ya estábamos en el centro historio, el puente es del silgo XIV medieval de estilo gótico.

Nada más cruzar el rio lo primero que vimos fue el pelourinho y el museo arqueológico, no esperes un edificio cerrado ya que solo quedan las ruinas del palacio de los condes de Barcelos y duques de Bragança, en este museo al aire libre y gratuito podrás ver columnas romanas, tumbas y esculturas.

La siguiente parada estaba al lado del museo arqueológico, visitamos la Iglesia Matriz de Santa Maria de Barcelos, la vista es gratis, de aquí fuimos en busca de las coordenadas de un cache y vimos el edificio de la Cámara Municipal.

Fuimos callejeando y descubriendo gallos y otra serie de estatuas, pasamos por delante del teatro Gil Vicente y llegamos hasta la Torre de Porta Nova, creo recordad que en su interior esta turismo.

Un poco más para adelante vimos la Iglesia do Senhor Bom Jesus da Cruz, fue diseñada en 1704 y su plata es octogonal.

De allí nos acercamos al mercado que está al lado que es un mercadillo en el que puedes encontrar desde una moto o una bici vieja a trastos que no sabrías que hacer con ellos.